Los veteranos aparatos de combate del F/A-18A del Ala 46 de Canarias, también conocidos como los “Halcones”, han puesto a prueba el amplio dispositivo antiaéreo del Mando Operativo Aeroespacial (MOA) en el archipiélago canario en el marco del ejercicio ‘Eagle Eye 21-01’.
Más de 2.000 militares del Ejército del Aire, Ejército de Tierra (ET) y Armada han trabajado del 19 al 23 de abril de forma conjunta para proteger el espacio aéreo nacional durante este supuesto táctico. Las islas orientales del archipiélago Canario han sido el escenario de la activación del ‘Eagle Eye 21-01’, el primero del año en este campo, que lidera el MOA.
Cabe destacar que los Eagle Eye se realizan de forma periódica y rotando en distintas zonas de España con la finalidad de potenciar la defensa del espacio aéreo de soberanía e interés nacional. Los pormenores de la fuerza desplegada los daba en el aeródromo militar de Lanzarote en el marco de una rueda de prensa el coronel Nicolás Ramírez Arregui.
En el curso de la presentación pudimos ver en este aeródromo al principal contingente aéreo participante: seis aviones de combate Eurofighter del Ala 11, que tiene sede en Morón (Sevilla). En total el Ejército del Aire ha desplegado un total de 1.560 militares, principalmente de la Jefatura del Sistema de Vigilancia y Control Aeroespacial (JSVICA), que tiene bajo su mando en las islas Canarias el Grupo de Alerta y Control (GRUALERCON) y los Escuadros de Vigilancia Aérea (EVAs) 21 y 22, en las isla de Gran Canaria y Lanzarote. Además, desde la base de Torrejón (Madrid), el Centro de Operaciones de Vigilancia Espacial (COVE) se encargó de proporcionar servicios de apoyo espacial a las operaciones.
En cuanto al ET, desplegó a su Unidad de Defensa Antiaérea (UDAA) del Mando de Artillería Antiaérea (MAAA) liderada este periodo por el Grupo GAAA I/73 con base en Cartagena (Murcia), que se encargó de ampliar la vigilancia y seguridad al aumentar la cobertura de los radares del Sistema de Mando y Control, en lo que se define en un sistema de defensa aérea por burbujas superpuestas. El GAAA I/73 constituye el Núcleo de Mando y Control y el Núcleo Logístico de la organización operativa. A su vez, el Núcleo de Fuego se compone de distintos sistemas de armas, misiles Mistral del Regimiento de Artillería Antiaérea 71 (Fuencarral-Madrid), los NASAMS de los Regimientos de Artillería Antiaérea 73 (Cartagena) y 94 (Las Palmas de Gran Canaria) y HAWK del Regimiento de Artillería Antiaérea 74 (Sevilla). Asimismo la Unidad de Transmisiones del Mando de Artillería Antiaérea garantizó el enlace e integración de la UDAA en el Sistema de Mando y Control (SMC). Además, una Compañía de Infantería perteneciente al Regimiento Soria 9 (Fuerteventura), el más antiguo del ET ya que sus orígenes se remontan a 1509, desarrolló cometidos de seguridad en el despliegue en apoyo a la UDAA MOA.
Por su parte, la Armada hizo llegar a aguas Canarias a su fragata “Álvaro de Bazán” (F-101), desde su base del Arsenal Militar de Ferrol (La Coruña). Se trata de una fragata tipo F-100, especialmente diseñada para la defensa antiaérea, cuyas principales misiones en la actualidad comprenden, entre otras, la escolta de unidades de la flota y la defensa aérea de su área de influencia, muy destacable gracias a su sistema Aegis, en el que destaca el radar multifunción SPY 1-D.
Para poner a prueba este complejo dispositivo se emplearon a fondo los veteranos F/A-18A del 462 Escuadrón, del Ala 46, que a diario, tanto de día como de noche, despegaban de la base de Gando haciendo incursiones aéreas contra el dispositivo de defensa montado por el ejercicio “Eagle Eye 21-01”. Una vez más, los “Halcones” canarios, que para la ocasión usaban el código radio “piper” en su papel de bando “red”, han demostrado la capacidad de la Unidad sobre los cielos de la zona de entrenamiento aéreo Delta-79 de Canarias. (Julio Maíz Sanz)
Fotografía: Uno de los seis Eurofighter del Ala 11 despegando del AM de Lanzarote, al fondo se ve el océano Atlántico, con el que está alineada la pista. (foto Antonio Rodriguez Santana)
