La noruega Kongsberg Maritime se ha adjudicado un contrato por valor de 200 millones de coronas noruegas (18,6 millones de euros) con el astillero español Navantia para suministrar sistemas de hélices para cinco de las futuras fragatas F110 de la Armada española. Kongsberg Maritime suministra hélices especialmente diseñadas para que las fragatas realicen operaciones de guerra antisubmarina o ASW (Anti Submarine Warfare).
Estos buques de nueva generación están diseñados para ser la continuación de las fragata F-100/105 de Navantia y sustitutas de las F-80, aunque a diferencia de las primeras que portan las hélices finlandesas Wärtsilä, ahora Navantia apuesta por la empresa noruega Kongsberg Maritime. Cada F-110 estará equipada así con sistemas gemelos de hélice de paso controlable o CPP (Controllable Pitch Propeller) de la noruega. Estamos ante un desarrolla específicamente diseñado para minimizar el ruido y la vibración en todo el sistema; desde las palas de la hélice a través de la línea del eje hasta el equipo asociado, como los cojinetes y la unidad de potencia hidráulica.
Los navíos involucradas en operaciones ASW, uno de los múltiples roles de las F-110, deben cumplir con exigentes requisitos de un nivel mínimo de ruido radiado submarino o URN (Underwater Radiated Noise), velocidad inicial de cavitación o CIS (Cavitation Inception Speed), pulsos de presión, etc. Es de destacar que en el proceso de selección para las hélices de las F-110, Navantia encargo pruebas de los modelos a escala en el instituto de investigación naval holandés MARIN (Maritime Research Institute Netherlands) y en el CEHIPAR (Centro de Experiencias Hidrodinámicas de El Pardo), un centro dependiente del INTA (Instituto Nacional de Técnica Aeroespacial) «Esteban Terradas», sito en El Pardo (Madrid), para verificar que se cumplieron los objetivos requeridos.
A diferencia de otros diseñadores de propulsores, esta empresa tiene su propio centro de investigación hidrodinámica sito en Kristinehamn (Suecia), conocido mundialmente por su trabajo pionero en hidrodinámica y diseños avanzados. Este centro, que está equipado con dos túneles de cavitación, lleva más de 40 años de funcionamiento, habiendo probado alrededor de 1.400 hélices y propulsores de chorro de agua para perfeccionar y probar el diseño. Las hélices de Kongsberg Maritime ofrecen un buen ahorro de combustible, bajos niveles de vibración y ruido, y una cavitación mínima.
Egil Haugsdal, presidente de Kongsberg Maritime, ha declarado: “Estamos muy contentos de trabajar con Navantia en este proyecto. Son una empresa de primera categoría y expertos en el ámbito de la construcción naval. Este pedido confirma una vez más el reconocimiento de la industria naval de Kongsberg como líder mundial en equipos de propulsión naval”. (Julio Maíz Sanz)
Fotografía: Imagen digital de la futura fragata F-110 donde se aprecian en la parte de popa (detrás) las hélices. (foto Navantia)
