La Armada española, como otras de su entorno que ya se han decidido por instalarlos, tiene como objetivo el incorporar un sistema láser defensivo en distintos tipos de buques. Lo más avanzado al respecto, sería la reserva de potencia eléctrica que se ha previsto en las cinco futuras fragatas F110, aunque es bastante probable que el empleo de estos equipos que tienen capacidad para frenar distintos tipos de amenazas en vuelo y en superficie se vayan generalizando y lleguen también a otros tipos de navíos militares.
De momento, por lo que sabemos y en espera de que se verifique cuál es la opción de sistema de láser de alta energía (HEL, High Energy Laser) más aconsejable -no es lo mismo derribar un pequeño drone que interceptar un misil desplazándose a Mach elevados-, sí se ha concretado avanzar para validar la capacidad nacional de poner a punto distintos conceptos con los que incluso poder llegar, eso sí dentro de unos años, a obtener capacidades de armas láser con potencia elevada con la que contrarrestar hasta misiles de crucero y actuar como contra ASCM (Anti-Ship Cruise Missiles).
En lo que ya se trabaja es en el llamado programa de investigación y desarrollo (I+D) SIGILAR (Sistema Guiado de Láser Pulsado para Ámbito Militar) que contemplaría la puesta a punto de un pedestal con emisor láser y una serie de equipos que permitan apuntarlo hacia el punto en el que el haz pueda neutralizar aquel objeto que se contemple como amenaza clara. Los trabajos en su obtención se iniciaron con la Resolución 320/38331/2018, de 17 de diciembre, por la cual la Dirección General de Armamento y Material (DGAM) aprobaba, tras su evaluación por el Sistema de Observación y Prospectiva Tecnológica (SOPT) de la Subdirección General de Planificación, Tecnología e Innovación (SDG PLATIN), una serie de proyectos de interés para la Defensa.
Con la temática genérica de armas de energía dirigida mediante láser de alta potencia, se aprobó el proyecto SIGILAR. Incluía la obtención de un sistema HEL para el ámbito Militar y el adjudicatario de los fondos de desarrollo fue el Centro de Láseres Pulsados Ultracortos Ultraintensos (CLPU) de Salamanca. Desde diciembre de 2019 y hasta finales de octubre de 2021 trabajan para poner a punto un demostrador láser de más de 15 kilovatios de potencia pico que dispare de forma estable y que se pueda acoplar a una plataforma con un sistema de control y direccionamiento del haz, equipo que será sometido a ensayos de funcionalidad en pruebas de campo a partir de su entrega.
Junto a CLPU, y dentro del programa COINCIDENTE, trabaja Escribano Mechanical and Engineering (EM&E), ambas apoyadas por el Instituto Nacional de Técnica Aeroespacial (INTA). Por lo que sabemos, y contando que este tipo de sistemas láser de medio sólido (SSL, Solid State Laser) son una de las mejores opciones para las amenazas que se incluyen en la guerra asimétrica, este equipo va a ser un equipo operativo de primera generación, o sea un demostrador. El emisor láser capaz de generar haces de luz de alta potencia pico se podrá, con un sistema de control y direccionamiento, acoplar a una plataforma para su validación. Es un concepto que, contando con recursos y apoyado por la Dirección Técnica de la Jefatura de Apoyo Logístico (JAL), puede dar lugar a un equipo nacional que evite la necesidad de adquirirlo a otros fabricantes extranjeros. (Octavio Díez Cámara)
Fotografía: SIGILAR es un demostrador de un arma láser para las fragatas F110, por lo cual aún quedan unos años para completar su desarrollo. (Navantia)
Varias empresas trabajan en conceptos como este cañón de Oerlikon, un dispositivo que da una idea de lo que podría interesar a la Armada española. (Octavio Díez Cámara)
No es descartable, y sería una opción muy versátil, incorporar en la modernización de las fragatas F100 un arma láser de alta energía. (Octavio Díez Cámara)