La Guardia Civil adquirirá tres embarcaciones patrulleras de casco semirrígidas con puente de mando cabinado para el Servicio Marítimo por valor de 1,2 millones de euros que serán entregadas en 2026.
La Jefatura de Asuntos Económicos de la Guardia Civil ha puesto en marcha esta adquisición para adquirir nuevas embarcaciones para el Servicio Marítimo dado que, como refleja la propia documentación, “un buen número de estas embarcaciones se encuentra próxima a su fin de ciclo de vida útil por lo que es necesaria la renovación progresiva de unidades, tal y como refleja el Plan de Renovación de Flota del Servicio Marítimo”.
Según recogen los pliegos de la licitación se adquirirán tres embarcaciones de casco semirrígido cabinadas (la tripulación dispone de un puente cerrado para mejorar la habitabilidad), para funciones de patrulla en los Servicios Marítimos Provinciales. Estas se emplearán en tareas de vigilancia, lucha contra el tráfico ilícito de sustancias y la inmigración irregular.
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La S-41, con una configuración hard-top. (AISTER)
Serán embarcaciones semirrígidas, construidas en aluminio, con una eslora (longitud) total de entre 11,6 y 12 metros (de casco entre 10 y 11 metros), una manga exterior de entre 3,5 y 4 metros), un calado máximo de entre 0,8 y 1 metro, propulsadas por dos motores fuera borda de cuatro tiempos con al menos 300 CV cada uno y una velocidad máxima superior a los 42 nudos (30 nudos de velocidad económica o de crucero).
Operarán con una tripulación de dos personas, durante misiones en el mar de 12 horas a aproximadamente 24 millas de la costa y tendrá una vida útil no inferior a 20 años, con un servicio máximo de 1.000 horas al año. Su diseño deberá facilitar el planeo lo antes posible (con una velocidad inferior a 25 nudos). Sobre el casco se situará una superestructura o cabina cerrada también de aluminio con un diseño panorámico para favorecer la visibilidad y una única puerta a popa.
Estos últimos años el Servicio Marítimo de la Guardia Civil se ha dotado de varios tipos de embarcaciones ligeras especializadas diseñadas y construidas por la viguesa AISTER como las RAL-1100-ZSF-OPEN, cuyo diseño podría coincidir con el de la embarcación deseada, caso de las S-17 para el Grupo Especial de Actividades Subacuáticas (GEAS) o las S-39, S-40 o S-41 entregadas en 2019.
Entre los criterios de valoración de las ofertas destacan el precio (un 55% de la valoración), la mejora de la velocidad máxima, de la autonomía o de la velocidad de planeo (cada uno de estos con el 15 %). (José Mª Navarro García)