Indra ha firmado con el Ministerio de Defensa español el contrato para dotar 24 helicópteros NH90 con los más avanzados sistemas de defensa electrónica, imprescindibles para reforzar la seguridad de la aeronave y su tripulación en zona de operaciones. El importe del contrato asciende a 111 millones de euros, tendrá una duración de 7 años y prevé ampliaciones de alcance hasta un total de 135 millones de euros aprobados por el Consejo de Ministros.
La compañía equipará las versiones GSPA y MSPT de este helicóptero que utilizarán el Ejército de Tierra, Ejército del Aire y la Armada, con una suite de autoprotección completa. Los elementos más innovadores incluirán el controlador de suite mejorado (EW Manager), un alertador radar de siguiente generación (RWR ALR-400FD) Full Digital y un sistema de contramedidas por infrarrojo DIRCM InShield.
Integrará y suministrará también todo el resto de elementos de la suite de defensa electrónica, incluyendo sensores de alerta misil (MWS), alerta láser (LWS) y el sistema dispensador de chaff y bengalas (CMDS) que sirven de señuelos para burlar los ataques, así como los equipos de prueba y soporte asociados en tierra.
La capacidad de los helicópteros para volar a baja velocidad y altura y para aterrizar prácticamente en cualquier lugar les confiere su principal ventaja operativa, pero también les hace especialmente vulnerables a un ataque. Al mismo tiempo, las amenazas han ido ganando sofisticación y son ahora mucho más eficaces y difíciles de detectar.
Los misiles guiados por radar, por ejemplo, utilizan técnicas de salto de frecuencia para ocultarse mientras que algunos lanzamisiles manpads, un arma barata y fácil de conseguir en el mercado negro, emplean proyectiles con sistemas de guiado muy sofisticados.
Para afrontar este desafío, Indra desarrollará un avanzado alertador de banda completa, con capacidad para vigilar de forma instantánea todo el espectro electromagnético, en lugar de cubrir diferentes franjas a través de estrategias de exploración de bandas parciales como era habitual hasta ahora.
Para llevar a cabo esta tarea, la compañía dotará al sistema de una capacidad de digitalización directa e instantánea del espectro electromagnético que le permitirá analizar todas las señales a una enorme velocidad y coordinar el resto de elementos de detección y contramedida. De esta forma, el sistema alertador de Indra detectará las amenazas con un nivel de fiabilidad e inmunidad frente a perturbaciones sin precedentes para neutralizarlas.
Por su parte, el sistema InShield de contramedidas por infrarrojo (DIRCM) de Indra cegará el sistema de guiado térmico de misiles que se lancen desde tierra con un haz de energía láser dirigida de forma automática, efectiva y segura.
Este sistema de contramedidas, de enorme sofisticación, y que es capaz de contrarrestar varios lanzamientos de misiles simultáneos, resulta clave para proteger a la aeronave cuando se dispone a aterrizar o despegar o cuando vuela a baja altura.
El sistema InShield fue probado en 2017 en los ejercicios EMBOW de la OTAN a bordo de un Chinook (CH-47). Actualmente es el único sistema DIRCM del mercado que ha demostrado sus capacidades en las pruebas de la Alianza. El sistema se está integrando para su operación en la flota de aviones A400M del Ejército del Aire.
Con este contrato para equipar los NH90 con sistemas de defensa electrónica, Indra da continuidad al trabajo que viene realizando en este helicóptero de nueva generación. La compañía ya equipó la primera remesa de esta clase helicópteros con sistemas de autoprotección, el sistema táctico de misión (AMPS) y el sistema de identificación amigo-enemigo (IFF).