“Una intervención más global de los medios – interior, inteligencia, ciberespacio, información en zona – y, sobre todo, la cooperación de los servicios policiales y militares es la clave”. Así, lo ha anunciado el ministro de Defensa en funciones, Pedro Morenés, durante su participación en la segunda reunión ministerial de la Coalición Internacional contra el Daesh, que ha tenido lugar en Washington durante los días 20 y 21 de julio.
Durante la jornada de trabajo del 20 de julio, celebrada en el centro de conferencias ‘General Jacob E. Smart’, la Coalición pudo constatar el debilitamiento del Daesh, tanto en Irak como en Siria. No obstante, el ministro en funciones destacó que “en Irak queda la toma de Mosul, operación militar de extremada envergadura, y de Raqqah en Siria, para decir que el movimiento yihadista radical que supone el Daesh queda desplazado”.
En este sentido, Morenés subrayó que el modelo de integración sunita empleado por España en la formación de brigadas iraquíes en Besmayah haya logrado sus resultados: “Hace tan sólo dos años, nunca podríamos imaginar que estas unidades podrían alcanzar la eficacia en combate, el liderazgo, la moral y el espíritu no sectario mostrado en la toma de Falluyah”.
De este modo, la participación nacional dentro de la Coalición ha consolidado la credibilidad y posición de España en la lucha contra el terrorismo yihadista. Así, Morenés afirmó que, tras la aprobación parlamentaria correspondiente, España mantendrá su compromiso con el esfuerzo global y reforzará su contribución, proporcionando apoyo especializado y capacidades adicionales dentro del amplio abanico de modalidades de apoyo militar existentes.
Entre estas capacidades se encuentran el refuerzo en la seguridad interior con la formación de unidades policiales, el asesoramiento en materia de sanidad, el adiestramiento táctico de unidades blindadas y la formación en la lucha contra artefactos explosivos improvisados (C-IED) y desminado.
Esta última actividad – formación C-IED – actualmente se está llevando a cabo en Jordania pero, desde inicios de 2017, está previsto que se comience a realizar en territorio iraquí, concretamente en la base de Besmayah, lo que supondrá una oportunidad para que España asuma un papel destacado en esta actividad, prioritaria para la Coalición.
Los ministros de Defensa también abordaron el problema de la metástasis del Daesh, no solo de su entorno geográfico sino también de la mutación permanente en su forma de actuación. De ahí que Morenés subrayase que “la cooperación combinada, entre varios países, y conjunta, dentro del propio país, es la clave”.
En la sesión de trabajo conjunta, los ministros de Defensa y de Exteriores de la Coalición se han reunido en el Departamento de Estado de Estados Unidos para abordar los esfuerzos militares y de estabilización en Irak y Siria, así como del planeamiento para la recuperación de Mosul y Raqqah.
Tras los avances logrados en la campaña militar, el ministro en funciones ha señalado que la Coalición, al configurar sus futuras operaciones, debe ampliar el enfoque actual y “dejar de considerar a las fuerzas de seguridad iraquíes como simples herramientas del Estado, para empezar a percibirlas y tratarlas como el pilar esencial y obligado de la reconstrucción del Estado iraquí”
“Además de contar con gobiernos legítimos en las capitales de Siria e Irak, el elemento fundamental para estabilizar ambos países es ineludiblemente un ejército y policía inclusivos y motivados”, ha continuado.
Para ello, Morenés considera que es necesaria una mayor implicación de los socios regionales y de las organizaciones internacionales, consecuencia directa de la mutación constante del Daesh, tanto al extenderse fluidamente a otros territorios como en su capacidad y velocidad de radicalización.
El ministro ha concluido su participación destacando la contribución española adicional al esfuerzo colectivo de la Coalición en tres áreas: la lucha contra la financiación de las redes terroristas, la lucha contra los terroristas extranjeros y la actividad en comunicación estratégica.
España contribuye al esfuerzo de la Coalición Internacional contra el Daesh con 306 militares. De ellos, 227 efectivos se encuentran desplegados en el centro de adiestramiento de Besmayah, liderado por España, para formar a las unidades del ejército iraquí, otros 65 instruyen a las fuerzas de operaciones especiales en Taji y Bagdad, completando el despliegue 14 militares en los cuarteles generales de Bagdad y Kuwait.
Hasta la fecha, los militares españoles han instruido a más de 5.000 soldados iraquíes, pertenecientes a dos brigadas ligeras y dos brigadas acorazadas, convirtiéndose España, de este modo, en la primera nación que asume el adiestramiento de este tipo de unidades.
Asimismo, dentro de la iniciativa de la OTAN sobre el desarrollo de capacidades para Irak, España ha contribuido a la formación en Jordania de soldados iraquíes en la lucha contra artefactos explosivos improvisados, con participación del personal del Centro de Excelencia aliado C-IED, con sede en Hoyo de Manzanares.
Como refuerzo en la región del norte de África y Oriente Medio, España también contribuye a la seguridad y estabilidad mediante la participación de las Fuerzas Armadas en otras operaciones militares, tales como el apoyo a la defensa antimisil de Turquía, con el despliegue de la unidad ‘Patriot’; la participación en las misiones de aviones de alerta temprana de la OTAN (AWACS); la misión de Naciones Unidas en Líbano para el cese de hostilidades entre Líbano e Israel; o, en el continente africano, junto a nuestros socios de la Unión Europea.