En pleno centro de la ciudad de Paysandú (tercera urbe del país, con 80.000 habitantes), un conocido comerciante judío fue apuñalado hasta morir por un sujeto a los gritos de "Alá es grande". El asesino es un maestro y ex director de escuela, convertido al Islam en los últimos meses. El hijo de la víctima, intentando evitar el ataque, resultó herido.
El atacante, rebautizado al adoptar su nueva identidad religiosa como Abdullah Omar, fue detenido por transeúntes al huir sin ofrecer demasiada resistencia y explicando tranquilamente que había perpetrado el ataque "por religión". El agresor era asiduo a varios cibercafés de Paysandú y declaró a las autoridades que “maté un judío por orden de Alá".
Uno de sus amigos virtuales, Saed Al Hassani, compartió una imagen este martes exhibiendo un cuchillo y comentando: "Este es el cuchillo que usé para el proceso de apelación, en la ciudad de Jaffa, que fue ocupada en la noche donde han resultado muertos 10 israelíes, venganza". De hecho, el atentado se asemeja bastante a los que están sucediendo a diario en Israel. Con más de 100 años, la colectividad judía de Paysandú, que integran unas 20 familias, es la tercera del país tras la de Montevideo y la del departamento de Maldonado, perfectamente integrada en su entorno.
Por su parte, en Argentina se ha decidido, tras el episodio uruguayo, reforzar las medidas de seguridad en torno a entidades judías. (Javier Bonilla)
