“Con esta aeronave tendremos la capacidad de contrarrestar diferentes amenazas y de hacer frente a la hipótesis de un ataque con armas balísticas sobre nuestro país”. Ese concepto, el de la capacidad de autodefensa ABM (Anti Ballistic Missile), así como el de un fuerte multiplicador de la propia fuerza militar, fueron manifestaciones que pudimos escuchar de Ibrahim Nasser M Al Alawi, el Comandante en Jefe de la Fuerza Aérea de Emiratos Árabes Unidos (UAE, United Arab Emirates).
Las explicaciones, en un vídeo previamente grabado, se enmarcaban en un acto en el que estuvimos presentes el pasado viernes y que se desarrolló en las instalaciones que la firma sueca SAAB tiene en Linköping. Allí, en un entorno en el que el secretismo fue en buena medida obligado protagonista, al no poder contestarse a determinadas preguntas concretas respecto de capacidades, precio, posibilidades operativas,… y en el que los presentes nos mantuvimos a una decena de metros del objetivo de todas las miradas, se mostró, a un grupo de Prensa internacional, el GlobalEye.
Se trata de un reactor tipo Global 6000, fabricado por la canadiense Bombardier, que ha sido drásticamente modificado para hacer de él una plataforma única. Lo es tanto por su novedoso concepto de capacidades integradas en la misma aeronave como por el hecho de que es, en buena medida y según la información de la que poseemos hoy, el más avanzado sistema especializado en cometidos de alerta aérea aerotransportada.
Lo consigue gracias a la aportación de distintas y novedosísimas tecnologías, una suma que ha costado al cliente lanzador del sistema, la Fuerza Aérea de UAE, unos quinientos millones de dólares la unidad. De momento, hay un primer avión que pronto iniciará sus pruebas en vuelo y será, posteriormente y en una fecha aún sin concretar, entregado al cliente. Le seguirán en los próximos años dos ejemplares más, proceso que se está realizando a la vez que se establecen en UAE las instalaciones que permitirán explotar todo su potencial y aquellas en las que se podrá mantener la máxima operatividad del sistema.
En el GlobalEye de SAAB, que ya ha llamado la atención de los máximos responsables de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) para observar un concepto que sería especialmente válido para reemplazar la actual flota de E-3A AWACS, se integra un radar Erieye ER (Extended Range) que es capaz de detectar objetos en vuelo a rangos de más de seiscientos kilómetros de su ubicación -se ha modificado para que sea capaz de detectar helicópteros, aviones en vuelo bajo o misiles balísticos-, un radar de vigilancia marítima capaz de discriminar buques y hasta periscopios de submarinos, y capacidades, como algunas proporcionadas por los dos anteriores y por un módulo optrónico giroestabilizado, que permiten seguir objetivos en tierra. Se trata, en suma, de un concepto de plataforma que rompe con lo que es tradicional y ofrece una suma de potencial bélico que marca una gran diferencia con lo que hasta ahora era clásico. (Octavio Díez Cámara)
Foto: GlobalEye (Octavio Díez Cámara)