Israel es uno de los países pioneros en el desarrollo de los vehículos aéreos no tripulados (Unmanned Aerial Vehicle o UAV), con un gran número de compañías en este sector especializado.
Los orígenes se remontan a 1962 con el desarrollo del primer UAV y la primera aplicación militar en 1962, hasta nuestros días, siendo reconocido en 2013 como el principal exportador a nivel mundial de estos productos y con más de 50 empresas entre grandes y pequeñas en 2018 cubriendo todo el espectro de aplicaciones, de tácticas a estratégicas, mini, micro, con aterrizaje y despegue vertical, sensores y sistemas de misión, municiones loitering y demás.
Entre 2005 y 2013 Israel facturó en este sector por valor de 4.620 millones de dólares, con la mayoría destinadas a Europa (50 por ciento) y Asia Pacífico (33 por ciento), expandiéndose actualmente a otros mercados (Sudamérica 11 por ciento y Norteamérica 4 por ciento) y acumulando un promedio de 100 millones de dólares en ventas anuales. De hecho aproximadamente el 10 % de las exportaciones de defensa de Israel corresponden a UAVs.
Las previsiones de este sector no paran de crecer puesto que según estudios recientes el uso de aeronaves no tripuladas para aplicaciones militares no dejará de crecer, tanto por nuevas aplicaciones como por el empleo de sistemas no tripulados reemplazando otros tripulados hasta ahora. Se estima que en 2024 el sector alcanzará los 12.000 millones de facturación, la mayoría para aplicaciones de defensa.
Hasta ahora convivían empresas de diferentes tipos, pequeñas start-ups de pequeño tamaño muy especializadas, con otros gigantes del sector aeronáutico como IAI o Elbit Systems. Muchas de las grandes compañías recurrían a especialistas para ofrecer productos en este sector. Esta colaboración que se ha mantenido durante años ahora está tornando en concentración en el sector con la compra de algunas de estas pequeñas y medianas empresas por parte de los gigantes. Las grandes compañías consideran que el sector seguirá creciendo por lo que no quieren dejar escapar la oportunidad mientras que las pequeñas acceden a nuevos mercados o programas de mayor envergadura que su tamaño contenido les impedía alcanzar.
Un ejemplo lo tuvimos el año pasado con la compra de Aeronautics a cargo de Rafael Advanced Defence Systems, adquiriendo Rafael la mitad del accionariado. Precisamente Aeronautics estuvo en el punto de mira de Israel Aerospace Industries que ahora ha anunciado la adquisición de la mitad del accionariado de otro especialista como es BlueBird Aero Systems, quedando la otra mitad en manos de su fundador y actual CEO que mantendrá por ahora el cargo. En 2018 Elbit Systems formalizó la compra de Israel Military Industries (IMI), por lo que pudo incorporar el área de cabezas de combate para sus UAVs, adentrándose en el segmento de los aparatos loitering. Antes en 2011 formalizó la compra del grupo Elisra, que entre otras, integraba a Tadiran, responsable en los años setenta del Mastiff, considerado el primer UAV de moderno diseño.
Igual que Aeronautics, BlueBird estaba especializada en UAVS de tamaño pequeño y medio, en concreto en los de despegue aterriza vertical (Vertical Take-Off and Landing o VTOL) como los Wander B o Thunder B. (José Mª Navarro García)
Fotografía: El Wander B de Bluebird (Buebird Aero Systems)