Se ha firmado un importante acuerdo entre Polonia y el sector empresarial de la Defensa de Corea, representado por Lee Yong-Bae, presidente de Hyundai Rotem, que permitirá a los polacos recibir cientos de obuses autopropulsados K9 Thunder, cientos de carros de combate K2 y cazas FA-50.
La idea es que el compromiso entre ambos países sirva para impulsar las capacidades actuales de la industria de Defensa de Polonia, pues lo que se buscaría es un acuerdo empresarial de coproducción para garantizar los procesos de obtención y su futuro mantenimiento y modernización. De lo que se ha difundido, y dada la situación actual en la que Polonia percibe una amenaza inminente por parte de Rusia, la incorporación del nuevo material se hará con rapidez en los próximos años.
El acuerdo, rubricado por el Vice Primer Ministro polaco Marjusz Blaszczak, prevé que la llegada de los primeros obuses autopropulsados K9 Thunder, una potente pieza de 155/52mm inspirada en el concepto del M109 pero mucho más capaz y con mayor alcance, puedan recibirse ya este 2022, pues serán fabricadas en Corea del Sur y se transferirán al Ejército de Polonia tan pronto estén disponibles.
Lo mismo, en lo que a plazos se refiere, va a suceder con los carros de combate K2 o con los aviones de combate FA-50, apostándose por la coproducción de la mayoría de ellos.
El 27 de julio se rubricó el acuerdo entre Polonia y Corea del Sur para que la primera reciba un importante paquete de material militar. (MD Polonia)
Cifras importantes
Sin tener datos concretos relativos a lo que en términos económicos supone el acuerdo, que personalmente puedo estimar en un monto que oscilaría entre los 10.000 y 15.000 millones de euros, lo que sí sabemos son las cifras estimadas que hablan cerca de setecientos obuses K9 Thunder, un millar de carros de combate K2 provistos con cañón de 120mm y tres escuadrones, cuarenta y ocho ejemplares, cazas FA-50.
Incluso, la llegada de estos últimos podría promover otros acuerdos complementarios para los KF-21 Boramae de última generación también fabricados por KAI.
La situación en Ucrania ha llevado a los más altos representantes del gobierno de Polonia a actuar con diligencia para reforzar sus unidades acorazadas y de Artillería, y también su potencial de apoyo aéreo. Lo van a hacer en un proceso de coproducción oneroso, pero que supondrá el recibir tecnología especialmente moderna y ver como sus propias industrias de Defensa se benefician de ello de forma directa e indirecta.
Más en detalle, el Ministerio de Defensa de Polonia informa que sobre los carros de combate K2 se van a recibir en dos fases, una de 180 ejemplares que comenzarán a llegar en 2022 y otra posterior que incluiría unos 800 del tipo K2PL adaptados a los requisitos polacos y producidos localmente a partir de 2026.
También van a llegar con rapidez 48 obuses autopropulsados K9 Thunder y se va a avanzar hacia una producción local de más ahondando en una mejora estratégica, acción complementaria con la adquisición de los obuses autopropulsados polacos Krab de Huta Stalowa Wola; probablemente, y así se ha manifestado ya el Vice Primer Ministro, se apueste por un modelo artillero que reúna lo mejor del K9 y del KRAB.
Sobre los K9 Thunder se sabe que 600 piezas más llegarán a Polonia a partir de 2024 y que desde el 2026 se asumirá un proceso de coproducción, probablemente por parte del consorcio Polska Grupa Zbrojeniowa, usando equipos de comunicaciones y de control de tiro como el Topaz local.
Las compras reforzarán decisiones como la de mantener un Ejército con 300.000 efectivos perfectamente pertrechados y preparados. (Octavio Díez Cámara)
Fotografía portada: Se estima que serán 648 los obuses autopropulsados K9 Thunder que llegarán a Polonia en los próximos años. (MD Corea del Sur)