El Servicio Industrial de la Marina (SIMA-PERU) ha iniciado la construcción de las dos primeras Patrulleras de Interdicción Marítima CB-90HSM adquiridas para la Marina de Guerra del Perú en el marco del Programa “Creación de los Servicios de Interdicción Marítima en el Dominio Marítimo Nacional – Código SNIP Nº 290121”.
La construcción de ambas unidades, que se realiza en el Taller X41 del SIMA mediante paquetes CKD (Complete Knock Down), tomará al menos 12 meses, previéndose que sean entregadas, tras las correspondientes pruebas en la mar, a fines de marzo de 2022. La adquisición de estas naves, cifrada en unos 4,8 millones de dólares, corrió por cuenta del Ministerio de la Producción (PRODUCE), que en octubre de 2019 suscribió un convenio específico con la Marina de Guerra, a fin de potenciar sus capacidades de control, vigilancia y supervisión de las embarcaciones que efectúan labores de pesca, cabotaje y tránsito por aguas jurisdiccionales a lo largo del litoral peruano. De acuerdo con información recabada por defensa.com, la Marina de Guerra ya obtuvo el financiamiento para otras dos CB-90HSM que comenzarían a ser construidas en agosto próximo.
Las CB-90HSM son naves multiplataforma de alto rendimiento que están diseñadas para desempeñarse no solo como Patrulleras de Interdicción Marítima o Fluvial, también son capaces de realizar Misiones de Combate, Patrullaje, Vigilancia y Defensa Costera u Operaciones Especiales. Tienen una eslora de 16,43 m, manga de 3,83 m. y calado de 0,8 m. Desplazan 18 toneladas en configuración estándar y unas 25 a plena carga. Están propulsadas por dos motores diésel – bien Scania DSI14 V8 o Caterpillar 3406ETA – y dos propulsores de chorro de agua Kamewa FF, que les permiten alcanzar una velocidad máxima de 45 nudos. Su autonomía es de 300 mn a 38 nudos. por 5.9 horas. La tripulación es de 3 y puede transportar de 16 a 18 efectivos. Dispone a proa, de una rampa que permite a sus efectivos desembarcar rápidamente en playas o zonas de difícil acceso.
El armamento incluye, por lo general, dos ametralladoras M-2 de 12.7 mm. en un montaje ubicado a proa - por la banda de estribor - frente al puesto del timonel y un RCWS que admite diversas configuraciones de armas, desde una ametralladora de 12.7 mm. a un cañón de 30 mm. o bien un lanzagranadas de 40 mm. En el caso de la Marina de Guerra del Perú, lo más probable es que ambas naves monten un RCWS Guardian de 12.7 mm. de Escribano M&E.
El Programa de “Creación de los Servicios de Interdicción Marítima en el Dominio Marítimo Nacional” - Código SNIP Nº 290121”, que prevé la adquisición de 24 naves, se generó a mediados de 2018. Las dos primeras unidades adquiridas, vía un contrato de 3,48 millones de dólares, fueron dos 45 Defiant fabricadas por Metal Shark Boats en su planta en Louisiana (Estados Unidos). Arribaron al Perú a inicios de febrero, y tras culminar las correspondientes pruebas navegación y aceptación, fueron incorporadas oficialmente el pasado día 23 de marzo. Están clasificadas como Patrulleras de Interdicción Marítima y ostentan los nombres de Punta Sal (PI-1301) y Cabo Blanco (PI-1302). (Alejo Marchessini, Corresponsal de Grupo Edefa en Lima).
Fotografías: Patrulleras de Interdicción Marítima CB-90HSM para la Marina de Guerra del Perú