El anuncio del desarrollo a comienzos de este año del nuevo misil interceptor Arrow 4 israelí dejaba entrever que contaría con nuevas capacidades que le permitieran enfrentarse a los nuevos retos surgidos en la región. Ahora podemos saber que entre estos nuevos retos están los misiles hiperveloces que podrían dotar al potencial adversario de Israel en la región, el régimen iraní de los ayatolás.
El Arrow 4 está siendo desarrollado por la Organización de Defensa de Misiles de Israel (IMDO) y la Agencia de Defensa de Misiles (MDA) estadounidense, con IAI como contratista principal. Se trata del elemento de interceptación de misiles balísticos dentro de la atmósfera (endoatmosférico) destinado a reemplazar al Arrow 2 que se encarga de esta tarea desde su entrada en servicio en el año 2000. El elemento exoatmosférico del sistema multicapa es el Arrow 3 que está en servicio desde 2017. El Arrow 4 se anunció como “avanzado e innovador”, con capacidades “mejoradas”, capaz de enfrentarse a las crecientes amenazas de la región durante las próximas décadas.
Entre las amenazas a las que deberá de enfrentarse el Arrow 4 están los misiles hipersónicos en desarrollo, capaces de alcanzar velocidades de 5 a 10 Mach. Esta tecnología podría llegar a Irán o incluso a Hezbollah (apoyada por el primero) vía Rusia o Corea del Norte que tienen misiles ya en servicio caso del primero o en desarrollo, caso del segundo.
Una materialización de esta amenaza fue por ejemplo el despliegue el pasado mes de julio del misil hipersónico KH-47M2 Kinzhal en Siria de la mano de aviones de combate Mig-31 rusos. Se trata de un misil hipersónico con un radio de combate estimado de 2000 km. que incluso podría haber sido probado ya en el mediterráneo durante ese despliegue.
El misil hipersónico Kinzhal
Según analizábamos en febrero de 2020, el Kh-47M2 Kinzhal (Puñal) es una de las seis nuevas armas estratégicas rusas presentadas por el presidente Vladimir Putin en su discurso del Estado de la Nación a la Asamblea Federal del 1 de marzo de 2018. Se trata de un misil balístico lanzado desde el aire (Air Launched Balistic Missile o ALBM) destinado a destruir objetivos de superficie fijos o móviles de entidad, tanto navales como terrestres, empleando cabezas de explosivo convencional o nuclear. Entre estos se incluyen instalaciones terrestres de defensa contra misiles balísticos o buques empleados en esta tarea.
Diseñado a partir del cuerpo del misil balístico Iskander, su principal características es que es capaz de alcanzar Mach 10, es decir, 10 veces la velocidad del sonido. De hecho antes de su lanzamiento, el avión portador debe alcanzar una elevada velocidad para que el misil pueda activar su motor de combustible sólido una vez lanzado. Entró en servicio en diciembre de 2017 a bordo de los Mig-31K y posteriormente en los bombarderos Tu-22M3. Actualmente hay diez interceptores dotados de este sistema de armas listos para ser desplegados en el Distrito Militar del Sur, en Ajtúbinsk.
Según informaciones rusas, en el primer aparato su “radio de combate” sería de 2.000 kilómetros mientras que usado desde el bombardero este se extendería hasta los 3.000 kilómetros, aunque en esta valoración se incluiría el alcance del avión portador y del misil. Técnicamente el “radio de combate” sería la distancia máxima a la que el avión puede alcanzar con el misil y volver a su base de ahí que el alcance exacto del Kinzhal sea aún incierto. En este sentido hay que recordar que el alcance máximo del misil balístico Iskander es de 500 km.
A su largo alcance y su elevada velocidad se suma la capacidad para realizar maniobras evasivas durante todo el vuelo, lo que dificulta notablemente su interceptación por parte de sistemas de defensa aérea. Desde Rusia se afirma que es inmune a sistemas de defensa como el Patriot, el THAAD (Terminal High Altitude Area Defense) o el sistema naval Aegis
En el caso de desplegarse sobre los Tu-160M su “radio de combate” sería previsiblemente mayor que los 3.000 anunciados puesto que el alcance de este avión (12.300 km.) supera notablemente al del Tu-22M3 (5.100 km.). (José Mª Navarro García)
Fotografia: El misil Arrow 4 en desarrollo (IAI)
Uno de los Mig-31 dotados con el misil Kinzhal (VKS)