Alemania ha donado al Ejército maliense, que lucha contra el terrorismo islámico en el conflictivo Sahel, 29 blindados 4x4 Casspir, un veterano vehículo de diseño y construcción sudafricana, que cuenta con capacidad antiminas o MRAP (Mine-Resistant Ambush Protected). Además, en el paquete de ayuda de refuerzo material de las capacidades del Ejército de Malí donado por el Gobierno de Berlín, también se han entregado 4.100 chalecos antibalas, 4.300 botas de combate y 2.700 cascos balísticos.
El equipo fue entregado por el embajador de Alemania a Mali, Dietrich Becker, el 16 de julio en un acuartelamiento sen Kati, la ciudad más grande de la región de Koulikoro, en Mali, cerca de la capital, Bamako. Becker dijo que la situación de seguridad en Mali representa una seria amenaza para la población local y para la estabilidad de la región, por lo que se requiere de una respuesta integral. El diplomático afirmó que su país ha apoyado a las fuerzas armadas de Malí durante casi 40 años, incluidas las donaciones de equipos. Alemania tiene actualmente mil militares y policías desplegados en la zona, que forman parte de la misión de mantenimiento de la paz MINUSMA (Mission multidimensionnelle intégrée des Nations unies pour la stabilisation au Mali) dirigida por la ONU, la misión de entrenamiento de las fuerzas locales dirigida por la Unión Europea EUTM Mali (European Union Training Mission in Mali) y la misión de asistencia EUCAP (European Union Capacity Building Mission) en Niger/Sahel.
El Jefe del Estado Mayor de las FAS (Fuerzas Armadas) de Malí, el mayor general Abdoulaye Coulibaly, aseguró que con los nuevos equipos donados se verán fortalecidas las capacidades militares, la logística y, en última instancia, la soberanía del Estado. Además señaló que Alemania había suministrado equipos anteriormente, habiendo entregado 25 camiones Mercedes en junio de 2018 junto con otros equipos.
Alemania tiene, de hecho, una larga relación con Malí y fue el primer país en reconocer la independencia del país en 1960. El embajador Becker recordó que Alemania se había comprometido a un acuerdo de paz y seguridad en 2015, por lo que las fuerzas alemanas entrenan a la seguridad de Malí y brindan apoyo a otras naciones del G5 del Sahel, que luchan contra las insurgencias islamistas y el terrorismo.
En su clara tendencia política pacifista, Berlín prefiere optar por donar ayuda militar, aunque sea comprando el material a terceros países, porque los 4x4 Casspir no proceden de excedentes de sus FAS, mientras, su principal socio europeo, Francia, combate a los terroristas en la llamada operación “Barkhane”.
Curiosamente el principal aliado de París en la citada operación de combate, es Reino Unido, que presta a los en torno a 4.000 militares franceses desplegados en el Sahel, parte del fundamental transporte aéreo táctico con sus helicópteros Chinook (Julio Maíz Sanz)
Fotos:
Vista lateral de uno de los “Casspir”, que aunque de fabricación sudafricana cuentan con los fiables elementos mecánicos de la firma Mercedes Benz.
El embajador Becker durante el acto de entrega, detrás se ven dos de los blindados “Casspir”.