La entrega de dos de los tres Cessna C-208B previstos para la Fuerza Aérea de Honduras (FAH) culminó el requerimiento militar de remplazar los C-47 de la Segunda Guerra Mundial. Honduras operó unos nueve ejemplares hasta hace unos años, con 60 años de servicio a sus espaldas. Los C-208B tienen capacidad para 9 pasajeros o 14 con FAR Parte 23 de Exención. Montan un motor turbohélice del tipo PT6A P&W-114-A y propulsor Hartzell de 3 palas. Además de los tres C-208B, la FAH se encuentra en proceso de adquisición de aeronaves L410 UVP-E20, con tres ya en operación y esperándose que sean cinco los adquiridos. Los C-208B han llegado nuevos desde los EEUU, mientras que la procedencia de los L410 es, aparentemente, de segunda-mano.
Fue en 2007 cuando se anunciaba que la FAH necesitaba hasta $430 millones para restaurar su parque aéreo. En esos días, el inspector general de la FAH, general Adán Suazo, señaló que entre el equipo deseado se requería un modelo de transporte mediano, con capacidad de transportar entre 20 y 25 pasajeros y entre 4.000 y 6.000 libras de carga. El general detalló que “estamos pensando en adquirir cuatro aviones construidos en la República Checa, del tipo LET420, un avión versátil y que está al alcance económico del país (…) Si logramos obtener la flota de los LET420 podría servir para varios propósitos, porque es un avión multipropósito que serviría como avión ambulancia, para transporte de carga, de pasajeros y combatir los incendios forestales”. Esto sorprendía un poco, pues no solamente el L420 es más bien un modelo ligero y no mediano, sino que también algunos oficiales de la FAH ya habían declarado su preferencia por el transporte medio C-23B Sherpa, pues uno de ellos había sido utilizado por el US Army de manera semi-permanente por muchos años desde Toncontin. Aunque ambos son aparatos de transporte STOL, el L410 puede llevar hasta 19 pasajeros, mientras que el C-23B puede transportar hasta 30.
En esas fechas (2007), existía una ley que impedía la inversión de recursos en la compra de material de segunda mano para la FAH. La ley especificaba que los fondos solo podían utilizarse en la compra de material nuevo, evitando así el mal uso de fondos, como había pasado anteriormente, cuando se habría adquirido equipo de segunda mano casi inservible. Hay que recordar que en la década de los 70, la FAH adquiría una partida de jets F-86K en Venezuela, y otros F-86E(M) junto con baterías M55A2 de 20mm, en Yugoslavia. Estos Sabres pasarían a formar del “Primer Grupo de Combate” de la Base Aérea Coronel Armando Escalón Espinal (AEE) en la ciudad de San Pedro de Sula, al norte del país. A su llegada a Honduras, se detectaría en esas máquinas sucesivos fallos en sus sistemas debido al desgate, pues sus fuselajes se encontraban al fin de su vida útil y sus sistemas registraban numerosas incidencias. Con esa ley en mente, se hizo evidente que las negociaciones por las cuatro aeronaves LET se hacían directamente con el fabricante checo, la empresa Let Kunovice. El general Suazo efectivamente confirmaba entonces que “…se han hecho varias pláticas y esa nación ha presentado varias ofertas y se está analizando para ver la posibilidad de adquirir ese avión”.
La ley cambió en el 2014, con la intención de facilitar la adquisición de remplazos de segunda mano para la flotilla de modelos T-27/T-27-A Tucano, en un esfuerzo por renovar las capacidades de la FAH en actividades de interdicción contra el narcotráfico. Pero las negociaciones tropezaron con que el modelo EMB-312 -- como se le conocía al Tucano comercialmente por su fabricante, la brasileña Embraer -- ya no se fabricaba. Se proponía entonces la compra de fuselajes de segunda mano exFAB para su renovación, aumentando el número de aeronaves en servicio, y así restaurar los cuadros de la FAH.
Finalmente, pero para sorpresa de todos, en febrero de 2015 la FAH volaba su primer LET410 UVP-E20 (o L420) en su misión oficial, aterrizando en el nuevo aeropuerto de Copan. Esta versión del transporte táctico lleva rotores de cinco palas, motores turbohélice Pratt & Whitney PT6A-27 y tanques auxiliares de combustible. Lo extraño es que el fabricante checo reconoce que, en Honduras, el modelo es operado solamente por las aerolíneas Sosa y CM, pero no por el estamento militar, pues al parecer, los aparatos no fueron adquiridos directamente de fábrica sino más bien de segunda mano, probablemente de lo que fuera la Atlantic Airlines, que operó hasta el 2008 con una flotilla de hasta doce L410, y la que fue destituida en el 2009 bajo cargos de corrupción.
En el 2007, la FAH explicaba que cada aeronave podría tener un precio de hasta los 5 millones de euros o más. No se sabe cuánto en realidad se pagó por los L410 actuales, ni se han dado detalles del contrato de compra-venta de los mismos. Por otro lado, en las negociaciones con los brasileños se dijo después que, en lugar de los T-27 adicionales, se negociaría por algunos EMB-314 Súper Tucanos. Hasta ahora, ni uno ni otro se ha concretado con Brasil. (J. Montes)
Fotografías:
·C208B de la FAH (SEDENA Honduras).
·El L420 en una ceremonia de la FAH.
·L420 de Atlantic Airlines en Honduras.