El MALE (Mando de Apoyo logístico) del Ejército de Tierra ha realizado la adquisición de más de 25 sistemas antidrones portátiles a la empresa española Aeronáutica SDLE, que serán utilizados por la Guardia Civil. El contrato, denominado “Adquisición de Sistemas de Bloqueo y Neutralización de Drones para la Guardia Civil” tiene un importe de 400.000 euros.
Se trata del mayor lote de adquisición de este tipo de sistema en un solo contrato en España. El sistema RPAS de Aeronáutica SDLE ya se encuentra en funcionamiento en la Guardia Civil desde el pasado 2019, por lo que es un sistema ampliamente testado, que ha demostrado su robustez y gran eficacia contra un número ilimitado de drones.
Los equipos son portátiles y actúan inhibiendo la señal de UAVs que sean identificados como potenciales amenazas mediante direccionales. Estos equipos, desarrollados por Aeronáutica SDLE, permiten inhibir un número ilimitado de drones, interrumpiendo todas las comunicaciones entre este y su emisora, lo que supone neutralizar la transmisión de enlace de vídeo, telemetría, mando y control, e incluso señal satélite.
Los requerimientos de este contrato indicaban la necesidad de un sistema de rápido despliegue y portátil con forma de rifle que pudiera alcanzar los 1.000 metros de inhibición. Además, los equipos son totalmente customizables, por lo que podrían incorporar antenas de inhibición omnidireccionales, muy útil para las amenazas que no hayan sido detectadas previamente. De esta manera se inhibirían múltiples drones de manera simultánea, que ataquen desde cualquier dirección.
Aeronáutica SDLE es fabricante de drones y sus contramedidas, que protegen contra el uso malicioso y delictivo de estas aeronaves. La compañía cuenta con múltiples versiones de este tipo de sistemas de seguridad, tanto detectores como inhibidores, de uso portátil, integrables en vehículos o en emplazamientos fijos. En este caso se trata de un sistema fabricado a medida de las necesidades de la Guardia Civil.
Los drones han supuesto una revolución en el ámbito aeronáutico, ya que permiten innumerables aplicaciones en ámbitos civiles, industriales y de seguridad. Pero actualmente se han convertido en equipos muy accesibles para el público en general, lo que puede llegar a constituir una seria amenaza si se usan indebidamente. La industria, y todo tipo de instituciones e infraestructuras críticas necesitan medidas de protección infalibles frente a usos maliciosos de los drones, como el espionaje, robo de datos, ataques físicos o cibernéticos, e incluso terrorismo. (José Mª Navarro García)
Fotografía: Uno de los sistemas diseñados para la Guardia Civil (Aeronáutica SDLE)
Los sistemas listos para la Guardia Civil (Aeronáutica SDLE)