Para proteger la mayor de sus instalaciones, la base naval de Rota (Cádiz), la Armada española acaba de adjudicar la adquisición de un sistema contra aeronaves no tripuladas a la empresa española Target Tecnología, una solución interina y urgente.
La adjudicación del sistema antidron o C-UAS (Counter- Unmanned Aerial System), como se les conoce internacionalmente, asciende a 520.000 euros más impuestos. Target Tecnología tiene como producto estrella en el campo de los C-UAS, al sistema EnforceAir 2, la solución contra UAS insignia de la compañía D-Fend Solutions. La toma de control cibernética basada en radiofrecuencia (RF) ofrece capacidades avanzadas para superar los desafíos de los drones no autorizados en todas los despliegues y sectores.
Este C-UAS fue anteriormente seleccionado por el Ejército del Aire y del Espacio, que a finales de 2023 adjudicó uno de los sistemas y, dado su buen resultado, se hacía con un segundo en junio de 2024, tal y como publicó en su momento defensa.com.
La Armada, que ha realizado la adjudicación a través de su Dirección de Gestión Económica de la Jefatura de Apoyo Logístico, razona la compra alegando que ha estado analizando las distintas alternativas para disponer de capacidad de defensa C-UAS, de última generación. La actual se alcanzó en 2019 y consiste en cinco sistemas completos compuestos por maletín de detección (de la empresa china DJI Aeroscope) y fusiles inhibidores portátiles Drone Defender. Desde entonces, por diferentes circunstancias, no ha sido posible potenciar esta capacidad de manera autónoma desde la Armada.
La evolución de la amenaza relacionada con el empleo de UAS o municiones merodeadoras en territorio nacional hace necesaria la adopción de soluciones interinas y urgentes que permitan alcanzar una cierta capacidad capacidad C-UAS hasta la llegada de los sistemas definitivos a través de los programas conjuntos de obtención en curso, con el objetivo de reforzar las capacidades de autodefensa de los buques e instalaciones de la Armada en dicha base naval de Rota.
La amenaza contra las bases navales de los sistemas no tripulados es más que una realidad, como lo han demostrado los ucranianos, atacando numerosas veces las instalaciones navales de la Flota del Mar Negro de la Federación rusa sitas en la localidad de Sebastopol. Estas acciones contra estas bases sitas en la ocupada a Ucrania desde 2014 península de Crimea, y la perdida de varias unidades navales, habría llevado a los marinos rusos a restringir la actividad en la otrora perla del mar Negro del poderío naval ruso. (Julio Maíz)
