La Brigada de Infantería Tercio de Armada (TEAR) se trasladará a instalaciones de adiestramiento nada convencionales para realizar uno de sus ejercicios anuales más relevantes. Lo más usual es que realicen prácticas en zonas costeras para prepararse para su rol anfibio expedicionario o que se ejerciten, en pequeños núcleos, en otros puntos del país.
En esta ocasión, y rompiendo con lo que es más clásico en el devenir de su capacitación operativa, se ha decidido que sean las instalaciones del Centro Nacional de Adiestramiento (CENAD) San Gregorio, un amplio espacio próximo a Zaragoza que facilita el movimiento de fuerzas motorizadas y mecanizadas y permite el empleo de todo tipo de sistemas de armas terrestres.
Según hemos conocido, la decisión de que el TEAR se traslade a San Gregorio -lo había visitado pequeños elementos de su estructura pero nunca una Fuerza de tal entidad- se enmarca en una voluntad de que sus fuerzas más características se adiestren en diferentes lugares y así se incida en una mejor capacitación para realizar aquellos cometidos que les son propios y que les podrían llevar, sí así se decidiese en un futuro, a participar en operaciones militares más allá de nuestras fronteras y a hacerlo en escenarios como los que ahora definen muchas de las misiones internacionales.
Entretanto se concrete esa hipótesis futurible, ellos insisten en mejorar su nivel de adiestramiento y por ello este cambio de ubicación formativa. La última semana de octubre y la primera de noviembre de 2019 ha sido el periodo escogido para este ejercicio. Los protagonistas son los infantes de Marina del Tercer Batallón Mecanizado (BDMZ-III) que van a estar reforzados por un importante contingente del Segundo Batallón de Desembarco (BD-II) y con otros recursos del TEAR, cifrándose el contingente total en algo más de medio millar de efectivos.
Su traslado a San Gregorio se ha realizado en una operación que simula un desplazamiento estratégico de fuerzas motorizadas hacia un punto bien distinto de su Base. Los casi mil kilómetros que separan ambos emplazamientos han requerido organizar un importante esfuerzo logístico con góndolas, tanto militares como civiles, en las que se ha proyectado el material más pesado que incluía varias decenas de los blindados 8x8 Piranha III que forman parte de la dotación más característica del BDMZ-III. Por carretera se han organizado varios convoyes con otros tipos de vehículos de ruedas que incluían desde los nuevos VAMTAC ST5 recibidos en los últimos tiempos a los camiones Iveco M250 que también se han ido recibiendo en los últimos años.
La operación, en lo que podríamos llamar una Agrupación Táctica reforzada de Infantería de Marina, ha demostrado que son capaces de conformar un núcleo de gran capacidad de combate y con rapidez llevarlo al punto en el que se requiera actúe.
Estos días en San Gregorio van a aprovecharlos en diferentes ejercicios y maniobras para prácticas de tiro individual, disparar misiles Spike, realizar prácticas de combate en población, ejercitarse en movimientos por puntos diferentes de los habituales, practicar actividades logísticas, etcétera. El TEAR, incide con prácticas como esta en mantener un altísimo nivel operativo y estar preparado para conformar un núcleo de respuesta inmediata nada convencional y especialmente capaz. (Octavio Díez Cámara)
Fotografía: Está previsto realizar disparos reales con el sistema de misiles contracarro de largo alcance Spike, su único recurso tras la baja reciente del sistema TOW. (Octavio Díez Cámara)
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.-El personal del TEAR mantiene un elevado nivel operativo gracias a intensos y exigentes ejercicios que les llevan a diferentes puntos de España y de otros países. (Octavio Díez Cámara)
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.-Los blindados Piranha III son unos potentes medios 8x8 que estos días van a ejercitarse en el CENAD San Gregorio. (Octavio Díez Cámara)
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.-Está previsto aprovechar las bondades del CENAD San Gregorio para todo tipo de prácticas, pero sobre todo aquellas relacionadas con las capacidades de fuego del TEAR. (Octavio Díez Cámara)
