El 12 de diciembre el Ejército de Tierra (ET) recepcionó un lote de 29 Vehículos Especiales Aerolanzables (VEA) de última generación MM-1A Mk-2 Falcata, popularmente conocidos como mulas mecánicas, fabricadas por la empresa madrileña Equipos Industriales de Manutención S.A. (Einsa), que ganó en 2015 el proceso de licitación para dotar al ET de un sistema de nueva generación. Han sido fabricados en su planta de Alcalá de Henares (Madrid).
Tras la aceptación por parte del ET, buena parte de estos VEA Falcata (en honor a la espada íbera), han sido ya trasladados al Parque y Centro de Mantenimiento de Vehículos de Ruedas (PCMVR) nº 1, en Torrejón de Ardoz, donde están en fase de cumplir los requisitos propios de la recepción, como pasar la ITV, dotarlos de seguros, trámites de documentación, etc. Una labor previa a su entrega a la unidad que los utilizará: la Brigada Paracaidista “Almogávares” VI (BRIPAC), que pronto tendrá operativas las Falcata en sus cercanas instalaciones de la Base “Príncipe” de Paracuellos del Jarama (Madrid).
Einsa está efectuando así mismo la formación del personal del ET (especialmente de la BRIPAC), tanto de los que operarán las Falcata como de los encargados de su mantenimiento. Esta instrucción se realiza en la sede de la empresa, mientras que los cursos de conducción tendrán su fase final todoterreno en el Campo de Maniobras y Tiro (CMT) de Uceda (Guadalajara). Con esta entrega se materializa el Acuerdo Marco para la adquisición de VEAs de última generación, firmado el verano de 2015, tras ganar Einsa el concurso promovido por la Jefatura de Asuntos Económicos del Mando de Apoyo Logístico del Ejército (MALE).
El Falcata es un vehículo que cumple plenamente los requerimientos del procedimiento de “Adquisición del VEA” convocado por la Jefatura del MALE, cuyo anuncio se publicaba en el Diario Oficial de la UE el 6 de diciembre de 2013 y en el 14 del mismo mes en el BOE. La principal particularidad de este material todoterreno es que puede ser transportado en aeronaves y ser lanzado en paracaídas desde los aviones del Ejército del Aire y de otros países aliados. El MM-1A Mk-2 Falcata tiene unas estudiadas dimensiones que permiten llevar hasta una docena en uno de los extendidos transportes C-130 Hercules, pudiendo ser lanzados mediante plataformas de carga igualmente desde otros aparatos como los Airbus Defence and Space C295 y el nuevo A400M. También pueden ser proyectados en helicópteros de maniobra o transporte. Centrándonos en los que usan las Fuerzas Aeromóviles del ET (FAMET), sería en los Boeing CH-47D Chinook y los recientemente incorporados Airbus Helicopters NH90, que los pueden llevar tanto dentro como mediante eslinga, y solo mediante este último método en los Airbus Helicopters AS332/532 Cougar.
Otra de las claves de la eficacia de las Falcata es que en el curso de las operaciones de asalto aéreo facilitan desde el primer momento una alta y vital capacidad de movilidad a las fuerzas paracaidistas, ya que pueden transportar seis combatientes o dos camillas. Igualmente es un material decisivo para el traslado y el empleo del armamento colectivo, ya que en los diferentes tipos de afustes que se le adaptan puede portar y hacer fuego con ametralladoras medias y pesadas, lanzagranadas automáticos de 40 mm, misiles anticarro Spike, o un lanzador de misiles antiaéreos Mistral. (Julio Maíz)
Fotografía: Línea de mulas mecánicas “Falcata”. Foto. Einsa.