España debe sumarse cuanto antes al programa Main Ground Combat System (MGCS) que definirá el futuro carro de combate europeo y hacerlo en el mismo plano que los países ya implicados. Es la principal conclusión extraida del evento “El futuro del carro de combate en Europa” que Grupo Edefa organizó ayer, 14 de noviembre, en la Escuela Técnica Superior de Ingenieros de Telecomunicación de la Universidad Politécnica de Madrid.
El foro reunió a representantes de las principales empresas internacionales implicadas en el programa MGCS, Rheinmetall y KNDS, al, Jefe de Operaciones del MGCS de la Oficina Federal alemana de Equipamiento, Tecnología de la Información y Apoyo en Servicio de la Bundeswehr, Colonel Armin Dirks, a expertos del Ejército de Tierra y a autoridades de ministerio de Defensa, que desglosaron los retos a los que se enfrenta el carro de combate en los conflictos actuales y lo que necesitan de él en el futuro. Junto a ellos, ponentes de las principales empresas españolas que tienen mucho que decir en este programa y en el futuro de las plataformas de combate del Ejército de Tierra expusieron sus capacidades.
Se recordó que, a semejanza del programa aéreo Futuro Sistema de Combate Aéreo (FCAS), en el que España ya participa, el MGCS es un sistema de armas más allá del carro de combate como elemento caracterizado por la potencia de fuego, la movilidad y la protección, aglutinando las más modernas tecnologías que multiplican sus capacidades y su interconexión en el campo de batalla. El Ejército de Tierra, que, como acertadamente se recordó, cuenta con una de las más numerosas flotas de carros de combate de Europa, tiene mucho que aportar en el programa, desde las fases más tempranas.
Redefinido como un sistema de combate acorazado de ámbito europeo, el MGCS se asemeja no solo al FCAS aéreo, si no a la European Patrol Corvette por enfoque avanzado y participación internacional. Como destacaron las empresas, este se puede convertir en un elemento tractor de la Base Tecnológica e Industrial de la Defensa (BTID), que habría de liderar TESS Defence, con independencia de cuáles sean las empresas implicadas o las que lideren la participación española, tema también analizado.
En una iniciativa como esta, ambiciosa y de largo recorrido, tienen cabida no solo las prime del sector, sino también un gran número de empresas pequeñas y medianas e incluso start-ups, volcadas estas en la innovación que caracterizarán a los sistemas del futuro.
Entre todas se puede abordar la fabricación de elementos principales, pero también de subsistemas y componentes, aportando soluciones innovadoras en áreas en las que la industria española destaca. Del MGCS se espera entren en servicio los primeros carros y sus sistemas asociados a partir de 2040, con una vida útil de entre 30 y 40 años.
Dado el amplio recorrido y la vocación eminentemente innovadora, este programa a lo largo de su vida tendrá un fuerte impacto en la BTID nacional, tanto en las fases propiamente de obtención sino también durante la vida útil de las plataformas y sus sistemas, en forma de continuas mejoras y actualizaciones, dado el valor creciente de estos sistemas embarcados, por su elevadísimo componente tecnológico.
La industria española representada planteó sus capacidades en todas las áreas, desde plataformas, a sistemas, pasando por optrónica, sensores, comunicaciones y armamento, recordando su numerosa participación en los actuales programas de innovación y desarrollo como el MARTE (Main ARmoured Tank of Europe), o el FMB-Tech. Indra, durante su intervención recordó que puede actuar como coordinador nacional en el MGCS como ya lo hace en los citados programas FCAS o MARTE.
La estructura bajo la que participar en un programa tan amplio también fue analizada en diferentes ocasiones, recordándose que el Ministerio de Defensa cuenta con Tess Defence como potencial catalizador de la participación española, formada por cuatro empresas, que participan en el citado programa MARTE. Ahora se espera el apoyo político que permita entrar en el programa como socio de pleno derecho, coordinando la participación industrial de la forma que se obtenga el mayor rendimiento tecnológico e industrial.
A lo largo de los próximos días desgranaremos cada una de las intervenciones, que pusieron en valor no solo la idoneidad del programa MGCS para las Fuerzas Armadas españolas sino la capacitación de cada una de las empresas nacionales presentes en el evento. (José Mª Navarro García)