El pasado 7 de febrero durante su intervención en el Congreso de los Diputados, el ministro de Asuntos Exteriores y de Cooperación, Alfonso Dastis afirmó que el Gobierno no va a ratificar el Tratado de Prohibición de Armas Nucleares por considerar que sigue un “camino equivocado”, por “solidaridad con nuestros aliados de la OTAN”, porque “socava el Tratado de No Proliferación (TNP)” y porque España busca “en el multilateralismo el mayor consenso posible, algo que este tratado no consigue”. Dastis se expresaba así tras ser preguntado por Pablo Bustinduy, portavoz del Grupo Parlamentario de Unidos Podemos en la Comisión de Asuntos Exteriores del Congreso
Según el ministro, “el espíritu que impulsa al Tratado de Prohibición de Armas Nucleares lo compartimos toda la humanidad y desde luego este Gobierno”, pero “ese tratado busca ese objetivo por el camino equivocado”. Para defender sus argumentos Dastis recordó que “la paradoja es que ninguno de los que han suscrito este tratado tiene armas nucleares y el riesgo, por tanto, es que socavaría el único régimen que está realmente actuando para evitar la proliferación, que es el Tratado de No Proliferación”.
Dastis aprovechó su turno de contrarréplica para recordar que el Tratado para la Prohibición de las Armas Nucleares lo han firmado 56 Estados pero solo ha sido ratificado por cuatro, en comparación con los 190 Estados que han ratificado el Tratado de No Proliferación.
En julio de 2017 se aproaba el Tratado para la Prohibición de las Armas Nucleares en cumplimiento de la resolución L41 de la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas, siendo apoyado por 122 Estados y rechazado por los nueve países que poseen armas nucleares y todos los miembros de la OTAN, incluyendo España. (José Mª Navarro García)
Fotografía: El ministro de Asuntos Exteriores y Cooperación Alfonso Dastis (La Moncloa)