(defensa.com) Con la vuelta al Museo de Cuatro Vientos, que pertenece al Ejército del Aire, del mítico McDonnell Douglas F-4C Phantom II, tras ser repintado por parte de la casi colindante Maestranza Aérea de Madrid (MAESMA), se inicia la restauración de una serie de aeronaves. Así, desde el 5 de noviembre el público puede volver a ver en el Museo el Phantom II, apreciándose al magnífico trabajo realizado.
A la de este emblemático aparato seguirán las restauraciones del cazabombardero Dassault Mirage IIIEE, el anfibio Consolidated PBY-5 Catalina y uno de los CASA-352, la versión española del histórico Junkers Ju-52/3m. Hablamos de aparatos que están expuestos en el exterior del Museo y que se van deteriorando, sobre todo su pintura, por las condiciones climatológicas de Madrid, que tiene inviernos fríos y veranos muy calurosos.
Además el personal del Museo, que encabeza el coronel Juan Ayuso Puente, está estudiando las posibilidades económicas de poder restaurar el RF-4C, la versión de reconocimiento del Phantom II, y algunos de los aviones rusos (Su-22, Mig-21 y Mig-23), que recibió desde Alemania, procedentes de la extinta República Democrática alemana.
El proceso, ya seguido con el Phantom II, comienza con el tedioso, aunque imprescindible, decapado de los aviones en las instalaciones del Museo por parte de los voluntarios que acuden de manera altruista a éste. Tras esta tarea, las aeronaves son pintadas a poder ser con los colores que llevaron cuando estaban operativos, en el caso del F-4C en los almacenes de la Maestranza se conservaba la pintura original, tanto en las instalaciones del MAESMA como en los talleres que tiene el Museo.
Igualmente el activo equipo del Museo está haciendo gestiones para poder incorporar un Beechcraft C-90 King Air y otro RF-4C con decoración gris de superioridad aérea, procedentes del Ejército del Aire, y un Boeing AV-8B Harrier, de los que están en proceso de dar de baja la Armada. Una necesaria renovación que permitiría nuevas incorporaciones, además de ver restauradas parte de las auténticas joyas que guarda esta instalación del Ejército del Aire sita en el madrileño barrio de Cuatro Vientos y más exactamente en el Km. 10,500 de la autovía A5. (Texto y fotografía: Julio Maíz Sanz).
Fotografías:
·El veterano “Phantom II”, que perteneció al Ala nº-12, parece con su nueva pintura listo para despegar desde su otrora sede de Torrejón de Ardoz (Madrid).
·Además de su esquema de dos tonos de verde y arena se han pintado en el F-4C las insignias que lucía el aparato cuando estaba operativo, incluido la cabeza del gato y su lema “No le busques tres pies…”. Al fondo, a su izquierda, se puede ver el PBY “Catalina” que será también repintado.