Las Fuerzas Paracaidistas españolas
Revista Defensa nº 25, mayo 1980, Teniente Coronel Martínez Vara de Rey
FONDO DOCUMENTAL DE DEFENSA, 2 de febrero de 2016
En los años 30, en España la Aviación Militar sólo era un servicio del Ejército de Tierra y sus oficiales —de todas las Armas— tenían que hacer el curso de piloto o de observador aéreo. Por aquellos años, el joven capitán Méndez Parada, guiado únicamente por el afán de salvar la vida de sus tripulaciones en caso de accidente, se reveló como el promotor del paracaidismo en España. Así empezaron a darse las primeras lecciones rudimentarias de paracaidismo en el aeródromo militar de Cuatro Vientos, a pocos kilómetros de Madrid.
Sin embargo, el primer salto colectivo, no se efectuará hasta 1935, en el aeropuerto de Barajas. La Federación Aeronáutica Española había organizado un festival aéreo en el que participaban nueve oficiales; cuatro capitanes y cinco tenientes. Se había elegido para hacer la demostración un trimotor Forker E-7 de las Líneas Aeropostales Españolas (LAPE), del que se habían previamente desmontado las puertas para facilitar el lanzamiento. Las condiciones atmosféricas eran adversas, a pesar de lo cual los oficiales saltaron y únicamente el capitán Álvarez resultó levemente herido a causa del viento que le arrastró al llegar al suelo. Después vino la Guerra Civil. Durante este período, aunque se producen algunos salvamentos gracias al paracaídas, no hubo en este terreno nada importante que señalar salvo, las primicias de una doctrina sobre tropas aerotransportadas, al revelarse el éxito del aerotransporte de las tropas españolas estacionadas en el norte de África, con armamento y equipo, a bordo de los Junker-52. Foto: Paracaidistas dirigiéndose a un punto...
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