(defensa.com) EEUU verá reducido en 80.000 efectivos las tropas terrestres. Raymond Odierno, jefe del Estado Mayor del Ejército norteamericano, ha dado a conocer este dato, que supone que el número de personal disponible pasará de 570.000 a 490.000 hasta 2017, lo que implica una reducción del 14%. Se eliminarán hasta 12 brigadas del US Army, que pasará de 47 a 35.
Además, Odierno explicó que podría darse una reducción adicional de otros 100.000 militares. Algunas de estas bajas se producirán por jubilación, pero la mayoría de ellas serán por partidas voluntarias que se llevarán a cabo durante los próximos cuatro años.Este recorte de personal se enmarca dentro del programa de reducción presupuestaria que afecta al Pentágono, el más importante que se ha llevado a cabo en EEUU desde la Segunda Guerra Mundial. Así, el número de efectivos en tierra será inferior al que se tenía en los años previos a los atentados del 11 de Septiembre.
La nueva estrategia de Defensa de Obama se dirige hacia la racionalización de recursos. Así, frente al ahorro implícito en la reducción de efectivos, se apuesta por flotas de sistemas aéreos no tripulados como herramienta básica para el desempeño en misiones internacionales, en las que priman las operaciones especiales frente al recurso de los grandes despliegues de efectivos. Este nuevo enfoque se gesta tras la retirada de las tropas de Irak y el progresivo abandono del suelo afgano. Definitivamente, la estrategia del uso intensivo de la tropa no parece contemplarse hoy en el horizonte, la efectividad frente a la cantidad conducen a una apuesta por las operaciones especiales y reconducen el gasto hacia la tecnología que asegure el éxito de estas misiones. (Javier Martínez)