Hemos entrevistado a Juan Bergelund, CEO y fundador de UAV Latam, un emprendedor a quien el concepto de visionario se ajusta como un guante, reconocido con el premio Drone Technology CEO of the year 2024 – Lationamerica, su entrada en el sector ha sido un auténtico revulsivo que ha llevado a la compañía a liderar los servicios empresariales con drones en América Latina.
Está en marcha una revolución tecnológica y de mentalidad que se sustenta en una transformación futura en la que los drones tendrán una presencia cada vez mayor en el entorno militar y también en el civil. Los generalmente conocidos como sistemas aéreos controlados a distancia (RPAS, Remotely Piloted Aerial System), que requieren de que alguien los controle desde un centro de operaciones que puede estar especialmente próximo a su área de trabajo o muy lejano, se transforman hacia el concepto UAS (Unmanned Aerial Systems) en los que la plataformas aéreas tendrán autonomía para seguir una ruta prefijada e incluso serán capaces de, por sI mismas, intervenir para hacer más efectivo su tránsito y el cumplimiento del cometido que se les haya encomendado.
Empresas como UAV Latam llevan años liderando un proceso por el que ofrecen a clientes, tanto gubernamentales como privados, soluciones innovadoras que se basan en drones y en sistemas a ellos asociados. Proponen actuaciones como las que permiten vigilar e inspeccionar infraestructuras críticas como aeropuertos, prisiones, puertos, plantas productoras de energía, industrias mineras o edificios gubernamentales de forma profesional y eficiente; ofrecen soluciones asociadas a trabajos agrícolas de mayor precisión, y brindan propuestas específicas de vigilancia aérea precisa de determinadas áreas y equipos antidrón que eviten que aeronaves no autorizadas vuelen en aquellos espacios que protegen.
Esa oferta de servicios y tecnología, que crece día a día al ir incorporando propuestas con las que hacer frente a necesidades que cada vez van a ser mayores, los convierten, al ser integradores de soluciones tecnológicas de Seguridad, Defensa y monitorización de grandes espacios o determinadas infraestructuras, en líderes de servicios empresariales con drones en América Latina.
Juan Bergelund se define como un media adapter en el entorno tecnológico. “Me gusta mucho la tecnología y la tengo en mi ADN. Entré en ese entorno muy temprano pues, antes de los drones, fui uno de los principales inventores y decisores en la telefonía por Internet en un momento en que nadie apostaba un dólar por ella. Ahora todo el mundo la usa. En la actualidad pasa algo similar con los drones y ahí estoy con ímpetu y voluntad positiva desde hace años cuando estuve, como ponente, en una feria en la que veinticinco éramos oradores y solo veinticinco los que nos escuchaban. Desde entonces… mucho ha cambiado”.
¿Cuál es el factor que, en este entorno, le hace diferente?
Creo que el factor diferenciador se sustenta en el hecho que no tengo temor a equivocarme. Tomo la tecnología disponible, que ya se que no va a estar al ciento por ciento de sus capacidades, y trabajo en la integración para ofrecer soluciones aceptables que evolucionarán hasta que se conviertan en algo que ya pueda ser puesto en producción.
¿Qué ofrece UAV Latam, produce, diseña…?
No, yo integro. Nuestra empresa, UAV Latam, es una compañía que se define como drone at the service. Nosotros no vendemos particularmente un dron o una cámara, lo que ofrecemos es un servicio en el que identificamos cual es el valor del cliente -donde realmente le “ajusta el zapato”- y sobre eso trabajamos para crear una solución que satisfaga sus necesidades. UAV Latam en este momento tiene operaciones en nueva países: Méjico, Costa Rica, República Dominicana, Panamá, Colombia, Brasil, Perú, Chile y Argentina. Yo soy el CEO y también el principal inversionista.
¿Clientes civiles, militares o policiales?
De los dos primeros. Básicamente tenemos clientes civiles, que son una de nuestras áreas de negocio principales, y también tenemos clientes militares que están siendo ya una apuesta fuerte entre nuestra clientela porque UAV Latam tiene tres líneas de negocio. Una que llamamos de análisis de precisión que incluye drones clásicos a los que se les encomiendan tareas como tomar mediciones u obtener información para catastros.
Otra, es la línea de Defensa y Seguridad a la que le estamos dando bastante énfasis tanto en la parte de los drones militares, más tácticos y más pesados, como en el entorno de los sistemas antidrón, porque así como hay drones buenos también hay drones malos.
La tercera línea, que tiene mucho que ver con mi espíritu de innovador, es la que se apuesta por utilizar los drones como medios aéreos para transportar cargas. Entre nuestros clientes está una empresa de construcción de redes de comunicaciones 5G que recurrió a nosotros porque quieren, en sustitución de los clásicos helicópteros, drones capaces de mover objetos que pesan 100 kilogramos y estamos trabajando en darles la mejor solución.
¿Eso es mucho más rentable desde el punto de vista económico?
Claro y es una tecnología disruptiva. Esa palabra tan bonita tiene que cumplir unos requisitos significativos que es que tiene que ser en un orden y magnitud diferente en relación con los costes.
¿Y esa palabra disruptiva la puede aplicar al entorno de la Defensa y de la Seguridad?
Exacto, porque la hora de operación de un helicóptero, entre unas cosas y otras, es de aproximadamente unos 3.000 dólares y en referencia a la hora de operación de un dron estaríamos hablando de unos 300 dólares. O sea, mira la gran diferencia que hay entre hacer una operación con dron y con un helicóptero común.
¿Cree que podrán llegar los drones a hacer lo mismo que los helicópteros?
Y mejor, mejor. Porque lo que pasa es que los helicópteros tienen su gran limitación que es su gran peso y que necesitan permisos. El coste de operación de un helicóptero es brutal. El coste de operación es como le apunto la décima parte en el dron. Es cuestión de tiempo. Nosotros somos, como lo venimos señalando en aquellas conferencias en las que participamos, el hermanito menor de la aviación pero que está creciendo muy rápido. Yo creo que en poco tiempo, llámese 10 años, la aviación se va a convertir en una aviación no tripulada.
¿Y eso, por qué?
Porque a los aviones y helicópteros hoy les caracteriza la presión de la dificultad que tiene su piloto o pilotos para operar con ellos. Todo tiene que ver con los sistemas de comunicaciones en tierra, no les ponemos a los pilotos la presión de … Podemos tener un piloto de emergencia, pero todo el manejo lo puede hacer un operador a distancia y con total seguridad
¿Un operador piloto?
Claro, y pongo el ejemplo de mi madre, que en paz descanse, cuando yo la llevé en el aeropuerto de Dallas a cambiar de terminal. La llevé al trenecito que hay en el aeropuerto. Cuando vio que no había conductor se salió del tren.
No estamos acostumbrados, pero es algo que requiere de tiempo. Igualmente va a pasar con los drones. Ya están haciendo funciones que antes sólo se hacían con helicópteros y aviones de la aviación comercial, pero ahora la tecnología permite utilizar los drones en múltiples aspectos -también en la parte de Seguridad y Defensa-, y evitando el riesgo humano que a muchos nos preocupa. Porque el riesgo humano usted sabe que no tiene precio… no es una cuestión de precio; la tecnología de los drones viene a reemplazar esos sistemas donde hay un alto riesgo, y es ahí donde cumplimos una función definitiva. (Octavio Díez Cámara)
