Declara que "tendrá que responder" si finalmente EEUU le impone sanciones
Las Fuerzas Armadas de Rusia probaron ayer con éxito un Misil Balístico Intercontinental (ICBM, por sus siglas en inglés) cerca del mar Caspio, en plenas tensiones por el despliegue de militares rusos en la península ucraniana de Crimea.Un portavoz del Ministerio de Defensa, Igor Yegorov, confirmó a la agencia RIA Novosti la prueba realizada por las Fuerzas de Misiles Estratégicos.
En concreto, los militares lanzaron un misil RS-12M Topol desde la región de Astracán, en el sur del país. El proyectil impactó con éxito en su objetivo, situado en Kazajistán.
En este mismo contexto, el Gobierno ruso, a través de su Ministerio de Exteriores, criticó duramente a Estados Unidos por sus amenazas de imponer sanciones a Rusia por su actuación en Ucrania y en particular en la región de Crimea, y advirtió de que si finalmente esto ocurre, Moscú "tendrá que responder". En un comunicado, el portavoz del Ministerio de Exteriores, Alexander Lukashevich, comunicó que las amenazas de Washington constituyen una "deprimente falta de conocimientos básicos de la historia" y acusó a los "políticos y estadistas estadounidenses" de no entender la situación real en un mundo multipolar en rápida evolución". El portavoz ruso recordó que cada vez que ocurre algo que "no encaja en el esquema americano" se recurre a amenazar con sanciones y en este caso con "serias consecuencias", que se han visto traducidas, entre otros, con la congelación de la cooperación militar y la cancelación de contactos a distintos niveles previstos de antemano. Además, prometen "nuevas medidas" pese a que "el daño será inevitablemente mutuo", añadió.
Publicado en El Economista, el 5 de Marzo de 2014