El alcance del nuevo proyectil de los submarinos lanzadores de misiles balísticos de la Armada del Ejército Popular de Liberación está produciendo alarma en Washington, que también espera unas pruebas de misiles de la vecina Corea del Norte. El lanzamiento de prueba del misil balístico o SLBM (Submarine-Launched Ballistic Missile) JL-3, abreviatura de Ju Lang (ola gigante en español), desde un submarino clase Jin, tuvo lugar el domingo día 22 de diciembre en el mar de Bohai que baña la costa del Norte de China.
Con su alcance los chinos podrían llegar a cualquier punto de Estados Unidos lanzándolo incluso sin salir de las aguas del Pacífico bajo control chino. La información la recoge el Washington Post de fuentes próximas al Departamento de Defensa de los Estados Unidos que no identifica.
El lanzamiento del JL-3, propulsado por combustible sólido y que tiene un alcance de aproximadamente 9.000 km, fue monitoreado por satélites de inteligencia de la Defensa de EEUU y otras plataformas (navíos y aeronaves) posicionadas en el Pacífico, que en conjunto realizaron el seguimiento de la trayectoria de vuelo hacia el oeste. No se revelaron otros detalles del lanzamiento, ni si la prueba de misiles fue exitosa. Estamos ante una nueva muestra de la impresionante evolución de la Armada del Ejército Popular de Liberación chino, de la que venimos haciendo algún seguimiento.
El nuevo misil JL-3 es parte clave de la modernización de las fuerzas nucleares estratégicas chinas, que se basa en nuevos misiles terrestres, incluido el multi-ojiva DF-41 del que deriva el JL-3, y el desarrollo de un nuevo bombardero estratégico y la mejora de las armas nucleares más antiguas. La referida prueba de lanzamiento es, al menos, la cuarta en los últimos dos años, una indicación de que China está desarrollando rápidamente el arma. El primer lanzamiento tuvo lugar en diciembre de 2018 y las pruebas sucesivas se llevaron a cabo en junio y octubre. Al igual que la del domingo, el disparo del nuevo SLBM de octubre tuvo lugar desde el mar de Bohai y voló hacia el oeste a una zona de impacto en el desierto de Gobi. Tras estos test, el JL-3 se puede integrar y adaptar a los seis submarinos de clase Jin o Tipo 094 que tiene actualmente en servicio la Armada China, y también en los proyectados de nueva generación del Tipo 096.
El capitán retirado de la US Navy (Armada de los Estados Unidos), James E. Fanell, dijo al Washington Post, respecto a la prueba de vuelo justo antes de Navidad, "no es solo una demostración de los avances que la Armada del Ejército Popular de Liberación ha hecho en la tecnología SLBM, sino que es una declaración a los Estados Unidos y al mundo por parte de Pekín de su intención estratégica de mantener a América en riesgo por el chantaje nuclear de la RPC". Así mismo declaró: "Desde el punto de vista operativo, aunque este lanzamiento no es una sorpresa sí demuestra la perfidia del desfile del 1 de octubre, el día nacional de la RPC, cuando se mostró el anterior misil JL-2 y se definió como el de mayor alcance y más alta tecnología de los SLBM de la Armada del Ejército Popular de Liberación. La realidad es que la RPC representa la misma amenaza existencial para la paz y la seguridad mundial que la que mantenía la URSS (Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas) al mundo hace 30 años".
Mientras, las agencias de inteligencia de Estados Unidos están en alerta ante una probable prueba de misiles de largo alcance anticipada por Corea del Norte. El gobierno comunista de Pionyang ha anunciado que planea llevar a cabo algún tipo de acción provocativa que coincida con las fiestas de Navidad o Año Nuevo. Un funcionario estadounidense dijo que la administración Trump está preparada para tomar medidas severas contra Corea del Norte si su Gobierno termina su moratoria en las pruebas de misiles de largo alcance. Este mensaje se transmitió la semana pasada al principal padrino asiático de Corea del Norte, China, durante las conversaciones en Pekín entre el Enviado Especial de Washington para Corea del Norte Stephen E. Biegun y los funcionarios de la RPC (República Popular China). (Julio Maíz Sanz)
Fotografía: Un submarino chipo del tipo 094, como el que ha lanzado el JL-3, desde los silos sitos detrás de la vela. (foto: wikimedia.org)