(defensa.com) Corea del Norte y Corea del Sur volvieron a enfrentarse con disparos de artillería durante el día de ayer después de que Pyongyang lanzase dos proyectiles desde la costa contra un buque militar surcoreano que se encontraba en las inmediaciones de la frontera marítima occidental de ambos países.
El lanzamiento de los proyectiles por parte de Pyongyang no causó ningún tipo de daño, puesto que no llegaron a impactar contra el navío. Pero el ataque provocó la misma respuesta por parte de Corea del Sur, que atacó con cinco rondas de proyectiles a un buque de la Armada norcoreana que se encontraba cerca de esta frontera del mar Amarillo, aunque finalmente no hubo que lamentar ningún tipo de víctima ni daños materiales.
Según explicó el ministerio de Defensa de Corea del Sur para la agencia de noticias Yonhap, el proyectil norcoreano cayó primeramente a unos 14 kilómetros de la isla de Yeonpyeong, donde se tuvo que evacuar a su población hasta los refugios antiaéreos de la isla. Un día antes, Corea del Norte ya había avisado que abriría fuego contra buques surcoreanos como represalia después de que Seúl lanzase disparos de advertencia contra navíos norcoreanos que habían cruzado esta frontera del mar Amarillo.
Esta misma zona fue objetivo de una ofensiva por parte de Pyongyang en el año 2010 que acabó con el hundimiento de la corbeta surcoreana Cheonan tras el disparo de un torpedo desde un submarino norcoreano, ataque que causó 46 bajas.
Corea del Norte ya devolvió la alerta a la región después de realizar un ensayo con fuego real en esta zona conocida como Línea Limítrofe del Norte (LLN) a finales de abril, y donde sólo semanas antes se había producido un nuevo intercambio de proyectiles entre las dos coreas que acabó con el envío de cazas F-15 surcoreanos a la zona para realizar labores de vigilancia. (J.Martínez)