El Secretario de la Marina de los Estados Unidos (United States Navy), Carlos del Toro, SECNAV (Secretary of the Navy), hizo público que se planea aplicar un programa de actualización en los buques más antiguos del tipo Arleigh Burke. Esos destructores, que se iniciaron con la entrada en servicio del DDG 51, se corresponden con la versión inicial, o Flight I.
Se acercan ya a los treinta y cinco años de vida estimada y corresponde aplicarles un intenso programa de mejoras que permita ampliar su vida operativa, pues comenzaron a entrar en servicio en 1991, en una configuración que desplazaba 8.400 toneladas.
Hoy, la U.S. Navy mantiene en activo setenta y tres de ellos y hay previsiones de construcción que afectan a diecinueve más. Entretanto, el proceso de mejora se ha decidido que se comience a aplicar con fondos ya provenientes del ejercicio económico de 2026 y que el proceso se aplique entre los años 2028 y 2035.
Las capacidades de los actuales DDGs son muchas, como han demostrado en numerosos conflictos acontecidos en las últimas décadas. (U.S. Navy)
Para avanzar en ese objetivo, se ha realizado una revisión exhaustiva de los cascos, estructuras y equipos para verificar que si es conveniente aplicar esa mejora. En apoyo de la decisión, que extenderá la vida útil de unos destructores que tienen un amplio potencial para el control del mar, se han tomado referencias recientes como su participación en el despliegue en el Mar Rojo y su empeño para combatir amenazas que van desde misiles a drones.
La revisión que ha hecho la U.S. Navy en los diez últimos meses se ha centrado en los destructores de la primera serie que incluyen una docena de los DDGs, tarea que ha llevado a determinar que se puede maximizar su vida en servicio de forma que sigan siendo un activo para la capacidad militar naval de los Estados Unidos.
Los DDGs Arleigh Burke son vectores navales con una amplia capacidad antiaérea y de ataque a objetivos de superficie. (U.S. Navy)
Se ha conocido que la aplicación de esa voluntad de mayor vida operativa, que en total se corresponde a 48 años más de uso, varía en función de cada uno de los buques, siendo posible aplicar en algunos un año más de tiempo operativo, en otros tres y en algunos cinco; algunos permanecerán en activo hasta 2036.
Se ha difundido que para el proceso se estima que se requerirán unos 6.000 millones de dólares, lo que supone un desembolso próximo a los 140 millones por cada año de más que alguno de esa docena de destructores estén navegando en beneficio de la U.S. Navy. (Octavio Díez Cámara)