El órdago turco a Rusia y el problema para España
El derribo de un bombardero Su-24 Fencer ruso por parte de Turquía en la frontera con Siria es, por ahora, la última señal de que Ankara puede convertirse en un problema para la OTAN y para Europa, problema que enmarca a España, que mantiene en la región la batería de defensa Patriot que suministró el Ejército de Tierra para proteger el espacio aéreo turco en el marco de una operación de la OTAN.
Turquía tiene una posición opuesta a la de Rusia en la campaña de Siria, mientras Moscú apoya al gobierno sirio y combate a diferentes facciones que se oponen a este, Turquía apoya a los grupos que se enfrentan al gobierno sirio y para ello estaría suministrando material militar a estos grupos, como al FSA (Free Syrian Army), con material como misiles anticarro TOW de fabricación estadounidense, que también habrían sido entregados por Arabia Saudí o Qatar. Lejos de combatir al Estado Islámico/Daesh en Siria, Turquía ha protestado a Rusia su participación en el conflicto sirio entre otros motivos por bombardear posiciones turcomanas en la región fronteriza. Sin embargo, tiene difícil justificación la decisión turca de derribar un avión de combate ruso, que si bien parece ser que atravesó el espacio aéreo turco, lo hizo durante diecisiete segundos y en el marco de una operación de bombardeo. Desde que Rusia comenzó su operación en Siria, han sido varios los incidentes en los que aeronaves rusas han protagonizado situaciones de tensión en la frontera turca, incluyendo...
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