El 8 de febrero llegaba a la Base Aérea de Getafe (Madrid) uno de los dos OC-135B de la United States Air Force (USAF), destinados a realizar misiones de Open Skies (Cielos Abiertos), como se puede ver inscrito en su cola. Con matrícula 61-2670, arribó procedente de la base aérea conjunta de Andrews, en Maryland, muy cerca de Washington, de hecho es allí donde están basados los dos Boeing VC-25, la versión modificada del Boeing 747 para puesto de mando y transporte VIP, que utiliza el presidente de los Estados Unidos, conocidos popularmente por su código radio de, Air Force One.
Volviendo a su hermano pequeño, el Boeing OC-135B, es uno de los WC-135B transformados en 1993 para realizar las misiones de observación que marca el tratado de la Organización para la Cooperación y la Seguridad en Europa (OSCE), por parte del Aeronautical Systems Center 4950th Test Wing sito en la Base Aérea de Wright-Patterson (Ohio-Estados Unidos).Tanto el citado aparato, como otro idéntico que se usa también para las operaciones Open Skies, están asignados al 45th Reconnaissance Squadron que a su vez depende del 55th Wing (Ala) que tiene sede en Offutt AFB (Nebraska).
La presencia de este avión en España, solo tiene el precedente de febrero de 2010, cuando realizó una escala en la misma instalación del Ejército del Aire en Madrid, que es de facto la de referencia para este tipo de aparatos y donde se reciben y planean las misiones de los aviones, principalmente rusos, que inspeccionan España. El origen de las operaciones Open Skies, surge del fin de la Guerra Fría, que se certificó en Helsinki en 1990, creándose a continuación una serie de instrumentos para asegurar a los antiguos “contendientes” que se cumpliría la limitación de fuerzas convencionales pactada durante la cumbre en la capital de Finlandia.
En el marco de estos compromisos contraídos por los Estados participantes en la Conferencia sobre la Seguridad y la Cooperación en Europa (CSCE), que posteriormente devino a su actual denominación de Organización, OSCE, se acordó promover una mayor apertura y transparencia en sus actividades militares, y contribuir al desarrollo y robustecimiento de la paz, la estabilidad y la seguridad mediante la creación de un régimen de Open Skies/Cielos Abiertos para la observación aérea.
Dicho Tratado, que fue firmado en 1992 aunque no entró en vigor hasta el 1 de enero de 2002, permite a sus Estados parte sobrevolar cualquier área del territorio de otro Estado Signatario y obtener imágenes aéreas. Tanto Estados Unidos como España son signatarias del acuerdo, junto a la mayoría de nuestros aliados de la OTAN, lo que la permite realizar vuelos de reconocimiento, principalmente sobre Rusia y antiguos países del Pacto de Varsovia, a la vez que se deben de permitir las visitas de los aviones de estas naciones y países neutrales como Suecia. (Julio Maíz Sanz)
Fotografías USAF.