Equipos cinológicos para la guerra subterránea. El mejor amigo del hombre, también bajo tierra.
Ejército de Tierra puso en marcha un proyecto hace años para el desarrollo de capacidades de combate en ambiente subterráneoEquipos cinológicos para la guerra subterránea. El mejor amigo del hombre, también bajo tierra.
El animal, una vez adaptado, parece sentirse cómodo en el interior de las galeríasEquipos cinológicos para la guerra subterránea. El mejor amigo del hombre, también bajo tierra.
Un perro y su guía preparándose para introducirse en una minaEquipos cinológicos para la guerra subterránea. El mejor amigo del hombre, también bajo tierra.
El movimiento por túneles y galerías puede ser difícil y penosos, sobre todo si hay obstáculos y derrumbamientosEquipos cinológicos para la guerra subterránea. El mejor amigo del hombre, también bajo tierra.
Los perros adiestrados pueden ser muy útiles para llevar a cabo ciertas misiones bajo tierraEquipos cinológicos para la guerra subterránea. El mejor amigo del hombre, también bajo tierra.
Un perro de ataque avanza junto al personal de la UCAS en el interior de una red de galerías subterráneasEquipos cinológicos para la guerra subterránea. El mejor amigo del hombre, también bajo tierra.
El perro ya parece haber localizado al elemento hostil y permanece alerta para atacar en el momento oportunoEquipos cinológicos para la guerra subterránea. El mejor amigo del hombre, también bajo tierra.
El guía será el único capaz de ordenar que el perro suelte la presa efectuada en el presunto terroristaEquipos cinológicos para la guerra subterránea. El mejor amigo del hombre, también bajo tierra.
El animal debe ser preparado para realizar movimientos verticales; en la imagen un perro con un arnés para ascensos y descensosEquipos cinológicos para la guerra subterránea. El mejor amigo del hombre, también bajo tierra.
La amenaza subterránea constituye una posibilidad muy real, por ello los cuerpos policiales disponen de unidades especializadas